Mi mundo de fantasías es tan perfecto para ser habitado que a veces me pregunto, ¿tiene algún sentido intentar ser parte de la realidad?
…
Lo dejo a su criterio.
Mi mundo de fantasías es tan perfecto para ser habitado que a veces me pregunto, ¿tiene algún sentido intentar ser parte de la realidad?
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Lo dejo a su criterio.
Si revelarse es ir contra lo establecido, propongo la rebeldía.
En el mundo la belleza del alma no es prioridad, por lo tanto, creo que ser un alma bella es ser revolucionario.
Amar sin espera nada, exaltar la propia esencia y actuar consecuentemente.
¡Esa es la verdadera revolución!
(Pizarnik ya nos lo dijo muy claro).