21/1/14

Pies

Mis pies.

Mis pies delgados y pequeños. Mis pies están enamorados. Están enamorados de otros pies. Unos que son más grandes (no tanto) y son más anchos (no tanto).

Ese otro par de pies –por fortuna- está enamorado de mis pies. Ellos se enriedan  por las noches; se acarician mientras ven una película; bailan unos frente a los otros, chocándose y siguiendo el mismo ritmo. 

Son como gemelos enamorados de gemelos.

Están enamorados y eso los hace felices. Andan con paso firme y saben hacia dónde van y a dónde quieren llegar.


Mis pies y los pies con los que se aman, ya comenzaron a caminar el mismo camino.