Asumía que tenía mi blog desertado. Sabía que mi cabeza enteramente achicharrada con excesivas cuestiones no podía generar nada nuevo en este espacio. Pero no me había dado cuenta de que agosto había pasado desapercibido en lo que a mi actividad bloggera atañe.
¿Será por sus 5 lunes, 5 domingos y 5 no sé que, que me llegaron en una de esas cadenas que siempre deleteo sin ver, pero que como mi hermana algo me había comentado miré de reojo?
¿Será por que es el mes representativo del invierno y aunque hubo unos días por lo menos aceptables igual ya lo tengo, en el disco rígido de los meses, en la casilla de correo no deseado?
¿Será porque el spam que se instaló en mi cabeza, mezclando resfrío, gripe y alergias al por mayor, no dejó que mi cerebro desarrolle alguna idea y mantuvo su word totalmente en blanco?
No lo sé, no lo sé.
No sé si tendré respuesta en algún momento o sólo tengo que mandar este mes a papelera de reciclaje, sin vista previa ni nada y esperar que la primavera se inserte en pantalla completa y con control de cambios.
Corto para siempre y quito del portapapeles a este mes de Agosto tan impertinente, sin encabezado ni pie de página en mi querido Beso de Woody.
Copio y pego una sonrisa enorme, esperando que esta ausencia tan larga, no se vuelva a repetir.