5/10/10

Degustación

N explica y yo aleteo con mis manos y hablo. Hablo y hablo y observo. Miro alrededor y hay más y más palabras.
Tomo un sorbo de ciruela y miles de estrellitas estallan en mi boca. Flotan entre el paladar y la lengua y se amontonan, tocándose con sus puntas y rozando mis papilas gustativas.
Hay variedad, variación. Abundan gustos y formas.

Me acuesto entre mariposas y luces que titilan y me levanto a oscuras y con las ideas arrugadas.
Esta mañana soy mirada nublada y ecos en mi cabeza.
Y me temo que vuelvo a tener pensamientos, teñidos de vino tinto.

3 comentarios:

Humberto Dib dijo...

Hola: Entré a tu blog por casualidad y me pareció muy bueno. No quería salir sin decírtelo.
Aprovecho para invitarte a entrar al mío que es de literatura.
Un saludo afectuoso desde Argentina.

www.humbertodib.blogspot.com

Anónimo dijo...

las ideas arrugadas nunca son buenas ideas...

vero mariani dijo...

ideas arrugadas.... que delicadeza! sos lo más!