1/10/10

Un Taural en la sala, por favor!

No que la vida a veces es por lo menos confusa?

Cierto que no siempre se llega al fondo de las cosas?

Mi amiga C dice que yo tengo una especie de obsesión con la verdad. Con lo indiscutible, con las cosas como son y como deben ser. Como si la realidad tuviera sólo una faceta y ese aspecto siempre debiera ser correcto. Como si uno tuviera la obligación constante de saber y decir las cosas con exactitud todo el tiempo.

Es un esfuerzo muy grande para mí. Una constante obligación conmigo misma de ser legítima todo el tiempo y de no poder tolerar que el resto no lo sea.

Tengo gastritis esta mañana. Es parte de mi autoexigencia y de lo mucho que le requiero al mundo que se porte bien. Que sea bueno y no se descarrile.

Me arde mucho la boca del estómago hoy por mi dolencia, pero a veces se me incendia por otras cuestiones.

Debería relajarme más, no? Tendría que no tomarme todo tan a pecho.

No voy a dejar de buscar que cada momento y cada acción sean lo más logradas posible, pero si no aflojo un poco, algo en mi interior va a estallar. Y no necesariamente mi tubo digestivo!

4 comentarios:

Darío dijo...

Yo busco la verdad, aunque ya sé que no está en ninguna parte imaginable para mi.

Darío dijo...

Y también porto la gastritis nerviosa, niña.

vero mariani dijo...

respirá profundo y volvé a leerte en "maravillosa primavera", nada de pastillas! la verdad está, la podemos encontrar, pero a veces cuesta que los demás entren en esa sintonía. y aunque rompa las bolas, a veces (sólo a veces) hay que dejarlos ser. they'll come around...

(igual genial este ataque de honestidad brutal, te re banco! jajaj)

besooooooo y buen finde!

lunera dijo...

hay un universo paralelo,dde peleamos por lo legitimo en cuanto a etica y sentimientos,es un esfuerzo,trae consecuencias,pero es la escencia innegable de los que habitamos este universo paralelo,utopico,intenso,dificil y maravilloso
cuanto mas te conozco mas te quiero y te admiro